La importancia del título radica en que:
a) va a ser leído con mayor frecuencia que el resto del trabajo;
b) identifica al anteproyecto.
Debe ser breve y sin palabras innecesarias: entre ocho y doce palabras se considera adecuado. Si el título es muy extenso, considere la posibilidad de usar un subtítulo. Deben evitarse los errores de sintaxis y las cacofonías. No siempre es necesario incluir el nombre del sitio o región donde será realizado el trabajo. Los nombres de los cultivos, patógenos u organismos de cualquier tipo deben consignarse, cuando sea necesario, tanto en su forma vernácula como con su nombre científico.